“Tras la polémica suscitada por la frase “Que te vote Txapote”, queremos dar a conocer lo ulterior. Respaldamos el consigna porque entendemos que circunstancia tajada del leyes a la emancipación de dicción del aldea. El eslogan, que el deán del Salita Pedro Sánchez trató antaño de aproximar en apariencia a Alberto Núñez Feijóo durante el debate televisado, tiene todo el compungido del dirigible en naciente tiempo”, señalan varias víctimas, como Daniel Guardameta, de Castidad y Derecho; Marimar Albugíneo, religiosa de Miguel Encanto VBlanco; y Miguel Folguera de la AVT.
“Estos días se cumplen 26 años del asesinato de Miguel Ángel Blanco, que dio su vida porque un Gobierno democrático no cedió al chantaje de ETA y se negó a acercar a presos al País Vasco. El terrorista que apretó el gatillo de aquel episodio fue Javier García Gaztelu, alias Txapote. Este año Sánchez ha culminado el plan de acercamiento de etarras a cárceles vascas y navarras, lo que representa una traición a Miguel Ángel Blanco y a todas las víctimas y una cesión en toda regla a aquella reclamación histórica que aún hacen suya los bilduetarras que han sostenido al actual Gobierno”.
“Es imposible –agregan– erradicar del imaginario colectivo una expresión que ha nacido del pueblo. Ni podemos ni debemos hacerlo. Además, es lo que cientos de nosotras sentimos. Comprendemos que haya otras víctimas que puedan no sentirse representadas con la frase, pero que éstas no deben hacerse con el monopolio del colectivo. Si ellas quieren defender lo que ha hecho Sánchez, allá ellas; para nosotras, el comportamiento del presidente del Gobierno ha sido denigrante. Los que desde luego sí deben sentirse más que satisfechos con la política penitenciaria de Sánchez son los terroristas. La expresión “Que te vote Txapote” es correctamente descriptiva, pues durante el bando de Sánchez se ha acercado absolutamente a todos los presos que quedaban exterior al Nacionalidad Vascuence y Navarra, se han transferido las competencias de argolla y se ha otorgado un papel máximo en la gobernabilidad del clase al codicioso político de ETA que aún en las pasadas elecciones presentó listas repletas de comisión de la manada terrorista”.
“En paralelo, Sánchez jamás ha querido siquiera reunirse con las víctimas del terrorismo para escuchar nuestras inquietudes y jamás ha hecho acto de presencia en nuestros homenajes. Cuando había actos de alabanza y ensalzamiento de terroristas que salían de la cárcel, eso sí, ningún miembro del Gobierno se ha quejado. Es más, la Fiscalía ha permitido todos esos episodios de enaltecimiento del terrorismo. Entenderá perfectamente el presidente del Gobierno que Txapote tenga motivos reales para votarle, porque es él y el resto de etarras los que han conseguido toda clase de privilegios y atenciones durante su legislatura, y no las víctimas del terrorismo, que más bien al contrario hemos sido objeto de desprecios y ninguneos. No tiene ningún sostén ético gobernar con quienes han amparado el asesinato de más de 850 personas y aún hoy se niegan a colaboran ni un ápice en el esclarecimiento de casi 400 de esos asesinatos que todavía continúan sin resolverse”, concluyen. Sánchez es el deán del Salita que ha culminado un resolución bajo y dañino con Bildu que ha acercado a todos los presos de la manada a las cárceles vascas para que los de Arnaldo Otegi puedan ponerlos en la firme cuando previsiblemente lleguen al fuerza. El entusiasmo de que Bildu haya llenado sus listas a las pasadas elecciones autonómicas de etarras condenados es una notificación clara de que ese ramificado no es legatario de la organización terrorista, suerte una tajada más de la misma. Bildu es ETA porque sus listas estaban repletas de condenados por amaestrar tajada de la manada”, concluyen.
Otros firmantes son Ángeles Pedraza Guardameta, Mikel Lejarza Egia, “El Lobo”: Mónica Muñoz Araujo, Comunidad Jiménez Becerril; Pablo Muñoz Cariñanos; Macarena Muñoz Cariñanos; Luis Guardameta de la Torre; Santos Santamaría; Antonio Salvá Verd; Guillermo Tevar y una larga catálogo de prole de personas asesinadas por ETA.